
Asaltan cantina El Escalón en SLP; testimonio revela detalles
SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 4 de marzo 2021.- Miguel Ángel tiene 46 años, los últimos tres, desempleado. La situación por la qué pasó en lo que considera un despido injustificado, se vino a agravar con la pandemia, cuando se complicó aún más encontrar un nuevo empleo; él refleja la realidad de miles de personas que superan los 40 años de edad.
Actualmente se apoya económicamente haciendo pequeños trabajos de lo que puede, pero no ha conseguido estabilidad económica, lo cual le ha traído ya incluso consecuencias sicológicas.
Una revisión por los distintos portales de oferta de empleo permite ver que el tope de edad promedio es de 38 años; en pocos aumenta a 40 y los menos a 45, sin distinción de si se trata de un puesto de operario de producción o un área de especialización, al parecer, los empleadores han dejado de ver en personas mayores a este rango de edad como productivos.
El abogado laboral y Maestro en Derechos Humanos Manuel Meave Llarena explica que el plantear ese tope de edad no va en contra de la Ley Federal del Trabajo, e incluso mientras no se explique en la oferta del empleo, una vez en las etapas de entrevista, por ejemplo para una empleada de mostrador, el contratante elegirá a una mujer de buena apariencia de 20, 22 años, porque eso es parte de la imagen del negocio.
Pueden incluso hacer entrevistas a personas con otras características o de más edad pero finalmente no serán seleccionadas.
Actualmente existen programas para incentivar el trabajo de los jóvenes y también para adultos mayores, pero el rango considerado maduro, entre los 40 y 59 años no cuenta con apoyo por parte de instituciones públicas o privadas, al no estar regulado por la ley el límite de edad para contratación.
El litigante señaló que incluso no debería haber esa limitante por la parte patronal, ya que si se contrata a una persona arriba de los 50 años y se va a jubilar pronto, deja de ser una carga económica para el empleador, pues pasa a ser responsabilidad del Seguro Social.
Datos de la Asociación Mexicana por la No Discriminación Laboral por la Edad o Género indican que en nuestro país, el 90 por ciento de las vacantes ofrecidas dejan fuera las personas mayores de 35 años y el perfil ideal de los empleadores son edad máxima de 28 años con experiencia de entre 3 y 5, con licenciatura y un rango salarial de 6 a 8 mil pesos.
Miguel cuenta con una trayectoria reconocida dentro de su ámbito, lo cual no ha sido factor que le facilite el encontrar trabajo, sobre todo por otro factor determinante que a esa edad juega por completo en contra: el grado de especialidad.
No existen, por ejemplo bolsas de trabajo para ciencia, tecnología o artes y en el área técnica abundan las ofertas para obreros.
Meave Llarena considera que la manera de generar posibilidades para los mayores de 40 años sería a través del impulso de estímulos fiscales para las empresas que oferten trabajo en ese rango, además de trabajar en un cambio de cultura laboral en general para evitar este tipo de discriminación encubierta.
Actualmente, el portal de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social de Gobierno del estado tiene en su portada banners que hablan de inclusión laboral para jóvenes, personas de la tercera edad y discapacitados, pero no remiten a algún programa específico y su espacio de vacantes quincenales -vinculado al Sistema Nacional de Empleo-, no se actualiza desde julio de 2021.
Con cada vez menos ánimo, Miguel indica, como convenciéndose a sí mismo, que pronto va a pasar esta situación y recuperará la estabilidad. La realidad, sin embargo, parece jugarle en contra.