Gobernar para las redes: el fenómeno Mariana Rodríguez

¡Bienvenidas y bienvenidos! Agradezco a Quadratín San Luis Potosí y a su directora, la destacada periodista Gina Salinas, por la generosa recepción de mis letras. En cada entrega, pondremos la mirada en lo imperceptible y trataremos de colocar el análisis político en ese exacto punto que escapa de nuestro cotidiano campo de visión: el Punto Ciego. Comencemos.

El pasado fin de semana, las redes sociales de nuestro país se volvieron a encender y polarizar por la política, esta vez con una notable diferencia: por primera vez, en mucho tiempo, el quid de la disputa digital no tuvo nada que ver con Andrés Manuel López Obrador, ni con los saldos nocivos de su gobierno de opereta.

En esta ocasión, el centro del debate giró en torno a Mariana Rodríguez y su decisión de cortarse el cabello en solidaridad con un niño que padece cáncer. No es casual que, de nuevo, Mariana se haya robado el show. Me atrevo a decir que estamos en presencia del más grande fenómeno de redes sociales vinculado a la política de los últimos años. No exagero.

La influencer fue artífice del triunfo electoral con mayor resonancia de 2021: la victoria de Movimiento Ciudadano en la gubernatura de Nuevo León.

Un estado en el que la presencia del “partido naranja” era raquítica hasta antes de los comicios y en el que todas las encuestas lo colocaban, al inicio de la campaña, en tercero o cuarto lugar de las preferencias, con muy pocas probabilidades de competir y mucho menos de ganar.

¿Qué papel jugó Mariana Rodríguez en el triunfo electoral de su esposo Samuel García? El más relevante. Con una imagen pública mejor posicionada que el ahora gobernador regio y, sobre todo, sin negativos.

Mariana es reconocida como una mujer emprendedora, auténtica, trabajadora, bonachona y con una imagen que suele ser modelo e inspiración para muchas mujeres jóvenes que quieren verse como ella, alcanzar el éxito empresarial y ser tendencia en las “benditas redes sociales”.
Ella ya era un fenómeno de Instagram (la red social de los jóvenes y los nuevos votantes), antes de que iniciara su relación con Samuel García.

En la balanza, en muchos de los momentos virales que han tenido como pareja, mientras él vivió momentos complicados por sus actitudes y dichos elitistas, sexistas o mirreynales, ella siempre generó positivos e incluso en sus dislates (su caída de una patineta, los tenis fosfo fosfo o sus lips sync) potenció el efecto viral y se volvió trendig topic.

Tan relevante fue su rol, que el Instituto Nacional Electoral fijó a Movimiento Ciudadano una multa por 55 millones de pesos, por considerar que el apoyo de Mariana a Samuel trascendió en el resultado de la elección, y por lo tanto, era susceptible de cuantificarse monetariamente.

Afortunadamente, la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación revocó la sanción, al entender que esas expresiones eran resultado del acompañamiento espontáneo que se derivan del vínculo matrimonial, por lo que el número de seguidores o la influencia digital no pueden considerarse limitantes del ejercicio del derecho de libertad de expresión.

Como sea, ahora Samuel García encabeza el Poder Ejecutivo y Mariana Rodríguez dirige la dependencia AMAR a Nuevo León desde donde apoyará los proyectos estratégicos del gobierno y atenderá “los asuntos relativos a prensa, comunicación social y relaciones públicas”. Sí, en ella descansarán las aspiraciones presidenciales de la famosa pareja tiktokera, aunque es previsible que el ejercicio del poder y la división de opiniones que produce García, terminen por alternar los roles y se perfile la figura de Rodríguez. Sí, como aspirante presidencial. Al tiempo.

Sería un script perfecto de redes sociales.

El triunfo de Mariana no es convencer a los mexicanos de la autenticidad de la decisión de cortarse el cabello en solidaridad con un niño con leucemia; tampoco es relevante si termina por imponerse la narrativa de que “no se rapó lo suficiente” y solo aprovechó para lucrar políticamente con un cambio de look fancy.

No. El propósito era colocar su imagen y su nombre en el spotlight y poner a todo el país a discutir su gesto. Y lo logró.

Especialmente, porque lo hizo en un país en el que se diagnostican casi 200 mil casos de cáncer al año y en un momento en el que la batalla de muchos padres y madres para conseguir medicamentos para curar a sus niños es un símbolo de lucha por la vida en contra de un gobierno incompetente y cínico.

Mientras que Beatriz Gutiérrez respondió a quienes le pidieron ayuda para los infantes enfermos de cáncer: “No soy médico, a lo mejor usted sí. Ande, ayúdeles” y la diputada federal de Morena, Patricia Armendáriz pidió “evidencia del desabasto de medicamentos” para poder creerles, Mariana Rodríguez fue empática, realizó un acto simple, pero poderoso simbólicamente y exhibió una humanidad que pareciera negada a los políticos profesionales.

Por supuesto, lo explotó en redes sociales, porque bien sabe que si no está ahí, no existe. ¿Será la hiperrealidad digital la kriptonita de Morena? ¿Mariana solo es pionera de la fórmula y otro actor político la capitalizará? Ya veremos.

POTOSINADAS

• Si otra cosa no ocurre, en los próximos días Morena tendrá presidenta del Consejo Estatal Electoral y de Participación Ciudadana en San Luis Potosí. Paloma Blanco López es una mujer preparada, y sin embargo, también es pública y notoria su afinidad ideológica con el partido oficial, tan así que el presidente de Morena en San Luis Potosí le dio el beso del diablo y celebró su llegada. Andan contentos los chairos. Sí, los mismos que se han dedicado a despedazar las instituciones electorales y la democracia.

• En San Lázaro se está cocinando el mayor aumento presupuestal para el estado de San Luis Potosí de toda su historia. Se calcula que los recursos andarían superando los 70 mil millones de pesos y serían, sin duda, una buena noticia para Ricardo Gallardo que querrá promoverse como el consentido presidencial. La mala para la gallardía: ese incremento tiraría por la borda el discurso de “necesidad” de un crédito por cientos de millones de pesos.

• Se vienen las horas más bajas para el impresentable exalcalde Xavier Nava: sus mandos policiales han sido vinculados a proceso penal por el caso de brutalidad policial contra la abogada Teresa Carrizales; se perfecciona jurídicamente el juicio político en su contra en el Congreso del Estado por el desacato de un amparo; y se interpondrán las denuncias fundadas y motivadas en contra de decenas de juniors muertos de hambre que cobraron millones como aviadores de lujo en el ayuntamiento, cuando en realidad hacían campaña a favor de Morena en la capital potosina. Navismo del nabo. Como dijo el clásico: puercos, cochinos, marranos, cerdos.