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Escala joven de Xilitla, SLP, el Aconcagua; montaña más alta de América
SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 13 de septiembre 2021.- Una granja de Alemania decidió enseñar a ir al baño a sus vacas y usar un retrete, con el objetivo de evitar que se acumulen y propaguen por el suelo los residuos de los desechos de las vacas, heces y orina que combinados generan amoníaco, un gas que contamina el suelo y los cursos de agua locales.
A pesar de que el amoníaco producido en el excremento de las vacas no contribuye directamente al cambio climático, cuando se filtra en el suelo los microbios lo convierten en óxido nitroso, el tercer gas de efecto invernadero más importante después del metano y el dióxido de carbono.
Además, de que la agricultura es la mayor fuente de emisiones de éste gas, la idea fue de un equipo internacional de investigadores del Instituto de Investigación de Biología de Animales de Granja (FBN) en Alemania y de la Universidad de Auckland (Nueva Zelanda) y los detalles se publicarán en la revista Current Biology.
Para entrenar a los terneros, los investigadores idearon el entrenamiento «MooLoo» que consiste en recompensar a los terneros cuando orinaban en la letrina y en conseguir que asociasen el hecho de orinar fuera de la letrina con una experiencia desagradable.