Buscan a Emir Yurel Torres, joven queretano desaparecido en SLP
SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 17 de noviembre de 2018.- No son pocos los institutos políticos que en San Luis Potosí mantienen al mismo personaje como dirigente desde hace años, o bien, la supuesta alternancia entre parientes para mantener un imperio y control con tintes obsesivos.
En opinión del politólogo, Hugo Alejandro Borjas, la vida interna de los partidos se ha caracterizado históricamente por una ausencia de democracia, pese a que en su discurso sus representantes aseguran lo contrario.
En San Luis Potosí el caso más brutal –define- ocurre con el partido estatal Conciencia Popular (PCP) cuyo dirigente, Oscar Carlos Vera Fábregat, ocupa el cargo desde el año 1997 y en ese lapso también ha establecido su modus vivendi en la función pública, con posiciones alcanzadas a través de estas siglas.
“Algunos otros también, cuando llegan a la presidencia buscan mantenerse y es un ejercicio antidemocrático pero no se les puede impedir; para interferir en la interna de los partidos es muy difícil porque los militantes no ejercen acción alguna ante estos escenarios, en el caso de Conciencia Popular han ocurrido algunos intentos pero al final no prosperan porque no hay eco al exterior”, refirió.
Otro ejemplo, es el ocurrido con el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), donde su dirigencia se ha alternado entre personas con una relación familiar directa, es el caso de Manuel Barrera Guillén y su esposa, Ivette Salazar, ambos han obtenido cargos públicos durante años y -cuando no- ocupan la dirigencia de este organismo político; actualmente es Eduardo Guillén Martell (primo hermano de Manuel Barrera) quien ocupa esta función y además ha sido su suplente en la búsqueda de cargos públicos.
José Belmarez Herrera, también ha mantenido el control al interior del Partido del Trabajo (PT) –como dirigente estatal desde 2011- y formó parte de la LXI Legislatura, una de las más cuestionadas por hechos de corrupción.
Un escenario similar ocurre en el partido Movimiento Ciudadano, donde el liderazgo estatal es de Eugenio Govea Arcos –antes del Partido Acción Nacional (PAN)- y quien precisamente hoy anunció la renovación de la estructura con el aviso de que él podría ocupar la responsabilidad por tres años más; de ser así, Govea Arcos tendrá tres periodos consecutivos al frente de estas siglas partidistas.
El politólogo refirió que uno de los partidos políticos que permite -hasta cierto punto- el involucramiento de su militancia para renovar dirigencia, es Acción Nacional, pues se perciben grupos y simpatías que deben enfrentarse, pero sin reglas claras o transparencia absoluta.
“Los partidos más pequeños son los que menos informan, ese ha sido el problema y más cuando algunos dirigentes creen que por darles el impulso o mantenerlos, pasan a ser de su propiedad (…) se sienten dueños del partido”, expuso.