Ironía
No hay nada más doloroso para una persona que ser “exiliado” a la <<Friend Zone>> por aquella otra persona con la que querían tener algo más, en especial cuando la relación se encaminaba en la dirección correcta. La verdad que acabar en la Friend Zone es una posibilidad segura de llegar sin darte cuenta, pero, aunque el cine nos quiere hacer creer lo contrario, eso no quiere decir que no haya manera de escapar de ahí. La friend zone ha sido definida por la RAE (Real Academia Española) como un limbo oscuro, confusión y falta de amor propio, que hacen que la evolución humana retroceda 150 mil años. Es muy notorio y normal hoy en día en pleno siglo XXI, que las mujeres cometan el famoso “error” de aceptar el patán que tanto han soñado, por el verdadero hombre que lo desean como “mejor amigo”; y no se diga el resultado final, Facebook lleno de publicaciones de mujeres solas manifestando y enalteciendo su soltería, y proyectando su nuevo empoderamiento sin reconocer su fallida decisión sentimental. En la época de nuestros padres la fórmula del amor aparentemente era más sencilla, con resultados óptimos sin tanto revuelo que hoy en día enorgullecen a través de las reuniones familiares de los abuelos con los hijos, nietos, incluso bisnietos; los protocolos sociales hacían que las relaciones fueran de cierto modo más claras y directas, y sobre todo, con valores. ¿Quién hubiera pensado que en plena época de Tinder y Facebook, el divorcio exprés, los amigos con derechos y la sexualidad flexible sin cariño, el amor se volvería más complicado? Llega un punto en toda relación nueva de amistad que se encamina a algo más allá, en el que te puedes dar cuenta de que como se va a ver su futuro, si ella piensa en ti como otra más de sus amigas o como alguien, con quién pudiese tener sexo, y quedar en una u otra categoría dependiendo de nuestro comportamiento, es lo que los psicólogos creen hoy en día, muy loco ¿no? Seamos sinceros, antes, cuando un hombre quería salir con una mujer, tenía ciertas actitudes y atenciones que eran muy clichés y bonitas, y que facilitaban el proceso de apareamiento… digo de cortejo. Actualmente esos “amigos” a los que las féminas mandan a la friend zone, es porque no dan las señales directas de tener intenciones más allá, del tipo que sea. No es que tengamos bajo autoestima, es posible protección debido a las nuevas leyes absurdas donde todo ya es violencia de género, incluso abrirles la puerta del coche, ya lo dijo la Fiscalía Especializada para la atención de la Mujer, la Familia y Delitos Sexuales de San Luis Potosí; además hay que agregar que la mayoría de las mujeres van asumiendo que todos los hombres les traen ganas. Lo de las comedias románticas en el cine va por modas, ahora la moda es hacer películas sobre mujeres independientes que deciden afrontar la maternidad en solitario (con demandas a diestra y siniestra, pero según ellas es lo más razonable en la vida real). Me refiero a la comedia romántica con drama protagonizada por Jennifer Aniston y Jason Bateman “The Switch” escrita por Allan Loeb. Titulada ‘Papá por accidente” en Argentina y Chile, ‘Loco por ella’ en Hispanoamérica, y ‘Un pequeño cambio en España. En resumidas cuenta en «The Switch» una mujer decide ser madre soltera, se busca un donante de semen, y en su «fiesta de concepción» (es en serio…) su mejor amigo borracho hasta los ojos cambia el semen del donante por el suyo propio. Siete años después, Wally (Jason Bateman) conoce al hijo de Kassie, y ella no acepta que está enamorada de él al entablar varias reuniones y al entablarse una relación afectiva entre el adulto y el pequeño, y ella se relaciona con el apuesto, adinerado y supuesto donante de esperma. Curiosamente estas películas que quieren dar una visión moderna y feminista de la maternidad acaban con un mensaje mucho más machista de lo que en principio pretenden, la aparición del rol masculino es absurda a la vez que inevitable, está equilibrado el papel principal. Eso sin contar que centrando al personaje femenino única y exclusivamente en su maternidad, se acaba realizando un retrato de la mujer como madre, más allá que como mujer, olvidando cualquier otro factor de su vida. Lo más digerible, es la relación del niño al sentir la esencia de su padre biológico, y aún más, cuando el “mejor amigo” asimila ser el padre de ese gran niño que proyecta todos sus rasgos y actitudes, deseando ejercer su rol paternal responsable. De hecho, creo que cabría la reflexión en torno a ese asunto, ¿realmente Kassie desea a uno de esos dos hombres, o lo hace por darle un padre a su hijo? Si nos enfocamos al comportamiento de la mujer y su relación con estos dos candidatos, no descartaría la segunda opción, pero supongo que los responsables de ‘Un pequeño cambio’ tienen una visión mucho más directa y simple del tema: le decisión de aceptar al patán y enviar a la Friend Zone al verdadero hombre. Con un final espectacular: reconocer la mala decisión de Kassie y entablar una verdadera relación y crear una Familia con su “mejor amigo”. Sigue mi Facebook @davidalvarezproductor.