La Pica

Para quienes se relamían los bigotes de que en San Luis Potosí sería la última conferencia de prensa que encabece el subsecretario federal de Salud, Hugo López-Gatell Ramírez, se quedarán con las ganas, porque la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero aclaró que al tratarse de un funcionario del poder Ejecutivo, su nombramiento o remoción corresponde al presidente de la República.

De modo que el rockstar de la 4T puede estar tranquilo -por si no lo estaba- porque no procederán las grillas de la Alianza Federalista en su contra.

Todo indica que los gobernadores que integran a este grupo de oposición decidieron ya no pedir la cabeza del doctor Gatell y enfocarse en los temas que más interesan, ya que con la presencia de la mayoría del Gabinete Legal y Ampliado, será posible sacar mayor raja que ponerse en contra del epidemiólogo, cuyos bonos se mantienen muy altos entre la población.

La que se frota las manos es la secretaria estatal de Salud, Mónica Liliana Rangel Martínez, quien acompañará al vocero del Covid 19 en la conferencia que se desarollará en el Centro de Convenciones y es su oportunidad de mostrar de qué está hecha y si quiere aparecer en las encuestas.

¿Usará cubrebocas?, es pregunta sin ánimos de contagio.

En los últimos días ha surgido la versión de que el efecto cucaracha con la captura de El Marro, perjudicó a San Luis Potosí, estado vecino de Guanajuato, donde operaba el peligroso delincuente, líder del Cártel de Santa Rosa de Lima.

Al parecer, sin embargo, vienen en son de paz, ya que el objetivo no es pelear el territorio, sino usar al estado como escondite, según declaraciones del experto Francisco Salazar Soni al periódico Reforma.

No olvidemos que José Antonio Yépez Ortiz, El Marro, formó un grupo criminal violento, que también tuvo desertores, como su amigo Noé Lara Belman, El Puma, quien pasaba desapercibido en San Luis, hasta que lo aprehendieron hace dos meses en un operativo federal.

Hasta el momento, nadie ha explicado qué hacía aquí el cofundador de ese cártel y quién lo protegía en su caso, pero tampoco podrá saberse cuáles fueron los avances con respecto al último reporte que dio el almirante José Rafael Ojeda Durán, sobre la presencia de grupos del crimen organizado en el estado.

Como sea, la reunión del presidente Andrés Manuel López Obrador con los Gobernadores de los Estados será en un búnker (el Centro de Convenciones), vigilado por cientos de policías estatales, municipales y militares.

La de este miércoles sería la última ocasión que se vea en persona a Esteban Moctezuma Barragán en San Luis, antes de definirse si será o no, precandidato de Morena a la gubernatura que se disputará en 2021.

El titular de la SEP llegaba con buenos bonos, hasta que se le ocurrió la puntada de invitar a los conductores de televisión para dar clases junto a los maestros. Este anuncio no fue del agrado de López Obrador, quien aprovechó la conferencia mañanera de ayer para desmentirlo.

Se nota que el Presidente no había sido consultado por Moctezuma o que se le hizo fácil tomar la decisión, sin medir las consecuencias de sus actos.

A pesar del resbalón, mañana mismo se verá si el mandatario federal le da vitrina o lo guarda un poco. La oportunidad será en la reunión de la Conago, pero en lo mediático, lo importante es que salga a la conferencia de prensa con el gobernador Juan Manuel Carreras López y la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero par hablar del regreso a clases. Porque si no…