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SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 23 de julio de 2020.- Entre la serie de estudios realizados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) para conocer el panorama económico y social se encuentra la Encuesta Nacional de Agencias Funerarias ante Covid 19 (ENAF), lo que permite caracterizar los acontecimientos relacionados con las muertes ocasionadas por la pandemia en dichas agencias.
La información de la encuesta se captó del 25 de mayo al 12 de junio, con un tamaño de muestras de 474 empresas funerarias del país, catalogadas como grandes, medianas, pequeñas y micro.
De acuerdo a los resultados de la ENAF 2020, en promedio una empresa grande prestó 351 servicios funerarios durante febrero, en tanto que en mayo realizó 516 servicios. En comparación, una mediana aumento de 108 a 135 servicios en los mismos meses; en el caso de una pequeña disminuyó de 48 a 47; y una microempresa realizó 12 servicios en febrero y 16 en mayo.
Asimismo, señala que la mitad de las empresas de servicios funerarios reportaron que sus ingresos totales permanecieron sin cambios durante la contingencia, en un tercio disminuyeron y en un 17.1 por ciento aumentaron.
Respecto al personal ocupado, ocho de cada diez empresas permanecieron igual, en un 9.6 por ciento disminuyó y en un 6.7 por ciento incrementó.
Cambios en el servicio
La encuesta revela que cuatro de cada diez empresas realizaron cambios en la duración de la velación de cuerpos; 27. 1 por ciento aplicó cambios en los trámites; 26.7 por ciento modificó los tiempos de espera, 12.5 por ciento negó la prestación del servicio y 38 por ciento realizó otro tipo de cambios. En contraste, poco más de la quinta parte de las empresas no modificó en ninguna manera la prestación de su servicio funerario.
Mientras que el 14.6 por ciento de las empresas tuvo que enfrentar situaciones de desabasto de insumos durante abril o mayo.
También señala que aproximadamente nueve de cada diez empresas realizaron cambios en los protocolos para el manejo de los cuerpos por muertes relacionadas con el virus SARS-CoV2 en abril o mayo de este año. Esta situación se presentó en la totalidad de las empresas grandes, mientras que el 14.6 por ciento no modificó sus protocolos.