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SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 2 de abril de 2020.- Hoy se conmemora el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, en un panorama difícil para las personas que padecen este trastorno al encontrarnos en medio de una pandemia por el Covid 19, que ha obligado a la población a estar aislada.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) explica que los Trastornos del Espectro Autista (TEA) son un grupo de complejos trastornos cerebrales, los cuales abarcan desde afecciones como el autismo, el síndrome desintegrador infantil y el síndrome de Asperger.
Estos se caracterizan por dificultades en la comunicación y la interacción social, así como por un repertorio de intereses y actividades que son restringidas y repetitivas.
Asimismo, se estima que un niño de cada 160 padece algún TEA, sin embargo, la OMS señala que se trata de un promedio, ya que las tasas de prevalencia varían enormemente. En el caso de México, de acuerdo a datos de la Unidad Nacional Autónoma de México (UNAM) 1 de cada 115 padecen autismo.
Aunque detectar un trastorno del espectro autista es difícil durante los primeros 12 meses de vida, la organización indica que es posible establecer un diagnóstico antes de que el niño cumpla los dos años. Estos signos tempranos pueden observarse en el retraso del desarrollo de las aptitudes lingüísticas y sociales, o su involución temporal, así como la aparición de determinadas conductas estereotipadas y repetitivas.
Para aquellos niños y niñas que presentan un TEA es primordial el apoyo de sus padres, para garantizar su acceso a los servicios sanitarios, educativos, empleo e independencia.
«Se ha demostrado además que los padres también pueden ayudar a dispensar tratamientos psicosociales y conductuales a sus propios hijos» indican.
Mientras que la intervención en la primera infancia es fundamental para optimizar el desarrollo y bienestar de las personas con un TEA. Además, se recomienda incluir el seguimiento del desarrollo infantil en la atención sistemática a la salud de la madre y el niño.