Regidora del PAN pide presupuesto para Bienestar Animal en SLP
SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 27 de agosto de 2018.- «Te ven raro, te hacen caras, hasta en tu propia familia te hacen a un lado», cuenta Carlos mientras muestra tatuajes en sus brazos.
Comenta que desde un inicio su familia no estuvo de acuerdo en que se tatuara y desafió las reglas: «Mis jefes son de lana y el qué dirán cuenta mucho en esos casos; lo hice y ya ni modo de ir a quitarlo, salía más caro».
México es un país tradicionalista que no acepta la transformación y por eso algunos temas siguen siendo motivo de escándalo, como los tatuajes, añadió.
«No es sólo en San Luis Potosí, creo que en todo México pasa lo mismo, en otros países ya se acepta hasta el consumo de marihuana y aquí solo por tus tatuajes y tu modo de vestir ya dicen que eres narco, que vendes droga o que la consumes, pero la verdad da risa tanta ignorancia».
Sergio, otro joven entrevistado en la plaza de armas, platicó que en cierta ocasión lo acusaron de haber robado la bicicleta de un niño, cuando lo que estaba haciendo era auxiliarlo luego de que el menor fue asaltado.
«Ese día entró a la casa mi mamá toda asustada, porque en la esquina le habían quitado la bicicleta a un morrito. Salimos rápido para ayudarlo, en eso llega la patrulla y los policías me señalan como sospechoso, no sabían siquiera como había estado el asunto, pero como yo andaba sin playera y con tatuajes les gusté como para ser delincuente» relata.
Ambos jóvenes afirman que se tatuaron por gusto, eligieron sus dibujos en base a algunas experiencias y creencias sobre la vida; a pesar de las circunstancias y malos ratos no se arrepienten.