Epilepsia, un mal sin cura

SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 1 de marzo de 2020.- El doctor especialista en padecimientos neurológicos, Jerónimo Rodríguez R., asegura que la epilepsia es un padecimiento que ocurre por diferentes factores, como tumores, infecciones en el sistema nervioso, traumatismos y otros de carácter genético, si bien no tiene una causa específica ni tampoco cura.

Los pacientes se deben tratar con medicamentos y en el caso de presentar tumores, requieren cirugías.

En el grupo de personas como bebés y adultos mayores de 65 años de edad, pueden perder la memoria definitivamente por las repetidas crisis, advirtió.

El neurólogo egresado de la Universidad Autónoma de Nuevo León,  y del Baylor College of Medicine, en Houston, Texas, dijo que los medicamentos que se usan para tratar esta enfermedad, son el clobazam, lamotrigina, levetiracetam, rufinamida, topiramato y otros.

Indicó que los enfermos pueden tener reacciones secundarias como mareos, dolores de cabeza y gastritis, efectos generalmente controlables.

Jerónimo Rodríguez dijo que también está la alternativa de la cirugía para tratar la epilepsia, cuando los medicamentos no logran controlarla por completo, con el objetivo de eliminar la enfermedad o reducir las crisis nerviosas, para lo cual es necesario extirpar una pequeña parte del cerebro.

“Existen diferentes tratamientos con cirugía como es el caso de la estimulación del cerebro con electrodos y es menos riesgosa. Se introduce al cerebro un implante permanente que libera señales eléctricas; entre otros métodos, como la hemisferectomía funcional, que trata de separar las conexiones del sistema nervioso del cuerpo sin hacer ninguna extirpación”, dijo. 

Señaló que también es posible acceder a los tratamientos con plantas medicinales como el derivado del componente del cannabis (tetrahidrocannabinol, THC) que actualmente se usa en pacientes que no muestran alguna mejora con los medicamentos, pero advirtió que no todos los casos son aptos.

“Son casos muy seleccionados, de difícil control; no son para todos”, aseguró el doctor.

Indicó que para el uso de la marihuana, el tratamiento se debe aplicar de manera responsable y que los médicos generales sean conscientes a quién la recetan, para evitar que resulte contraproducente.

“El tratamiento del cannabis apenas está en proceso y no existen estudios suficientes. La población no puede acceder a él de manera común y corriente, pero los médicos neurólogos están generalmente a favor”, señaló.

El neurólogo Jerónimo Rodríguez indicó que los niños y personas adultas que padecen la epilepsia, pueden tener una vida normal con el adecuado tratamiento.

MORTAL EN POBRES

La epilepsia es una enfermedad crónica que ataca a todas las personas del mundo y se desarrolla principalmente en el sistema nervioso. Más de 50 millones de seres humanos la sufren y según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se han diagnosticado por año, 2.4 millones de casos nuevos.

Esta enfermedad se da por la actividad eléctrica anormal de un grupo de neuronas en la corteza cerebral de los pacientes, lo que provoca convulsiones repentinas y la pérdida de la memoria.

Un dato demoledor es que casi el 80 por ciento de los pacientes, están en países con economía baja, por lo que no reciben el adecuado tratamiento y esto puede desencadenar en una muerte prematura.

“El 70% de las personas podría dejar de tener crisis convulsivas si tuvieran acceso al medicamento”, indica la OMS. 

La muerte prematura es hasta tres veces mayor entre quienes sufren epilepsia, a causa del ahogamiento, traumatismos craneoencefálicos y quemaduras. Por si fuera poco, también pueden padecer depresión y ansiedad.

A EDAD TEMPRANA

En el 75% de los casos, la epilepsia ataca antes de los 15 años de edad.

La OMS registra que entre el 30% y el 40% de los menores con epilepsia tienen problemas de desarrollo y aprendizaje, no van a la escuela por miedo a ser rechazados, pero cerca de cerca de dos tercios de población infantil que la padece supera las crisis convulsivas cuando llegan a la adolescencia, siempre y cuando lleven una vida sana y estén en constante revisión por su médico.

EL CASO GRACIELA

En México hasta hace poco se legalizó la marihuana para uso médico en personas que sufren ataques de epilepsia, así como otras enfermedades tipo crónicas que se desarrollan en el sistema nervioso.

Graciela Elizalde Benavides, la niña regiomontana que cuando se conoció su caso, contaba con ocho años de edad, padecía hasta 400 convulsiones al día debido al síndrome de Lennox-Gastaut, una forma grave de epilepsia difícil de controlar.

Su padre refirió que habían probado con todos los medicamentos que les otorgaron los doctores para atender la enfermedad y también fue operada varias veces sin tener un buen resultado.

Su padre Raúl Elizalde Garza, tramitó un amparo en 2015 en el Juzgado Tercero de Distrito en Materia Administrativa en el Distrito Federal para que se le autorizada adquirir el cannabidiol en el extranjero debido a que en México era ilegal obtenerlo y no había fabricación.

Tras ganar el amparo y tratar a su hija por cuatro años seguidos hubo mucha mejoría y de 400, pasó a solo 20 convulsiones diarias.