Esquiroles de oposición, apoyan a Morena
En días pasados se supo que tanto el gobernador de Jalisco como las alcaldesas de Juanacatlán no ven aceptable la instalación de una termoeléctrica que se planea instalar en aquel municipio jalisciense (
Los argumentos del gobernador, y la alcaldesa en línea con estos, que se hicieron públicos rondan la protección del medioambiente, la ausencia o deficiencia en el Manifiesto de Impacto Ambiental, MÍA, y similares condiciones respecto del uso de agua. La inversión es considerable pero, a pesar de ello la expresión es de un no rotundo.
Veamos la perspectiva desde la ciencia, tecnología e innovación, CTI.
Primero recordare qué hay muchos reportes por largo lapso sobre las condiciones de la calidad de agua en ríos que alimentan el lago de Chapala. Ni que decir del mismo, lago, la disminución de su nivel, invasión de planta acuática conocida como lirio, entre otros problemas.
Ahí hay varios retos científico-tecnológicos, reducción de contaminantes, manejo de la cuenca, etcétera.
En segundo lugar, es más que claro que las termoeléctricas son tecnología del hace más de un siglo. Está más que probado el efecto que tienen en cuerpos de agua -por ejemplo luego de l termoeléctrica en Villa de Reyes, SL.P., el río Santa María sólo lleva agua poquísimos días la años, y cuando hay lluvias torrenciales, las afectaciones productivas al campo de esa zona saltan a la vista-.
Aquí hay alternativas científico tecnológica que permitirían sostenibilidad productiva del campo, mediante remediación de aguas residuales, ya industriales ya municipales, reducción de huella de carbono en actividades industriales de la zona, manejo de fracción orgánica por residuos sólidos orgánicos, FORSU, y muchos efectos favorables más.
Tal es el caso de producción de biogas por digestión anaerobia de FORSU o bien megadigestiones de materia orgánica sólida y disuelta en aguas residuales.
De hecho, desarrollos CTI financiados con recursos públicos laicos, loq un implica que el desarrollo es nacional, es capaz de generar, como planta piloto, 60 KWh. Por ello, en las 24 horas diarias, generaría 60×24; es decir, 1.44 megawatts-día. Al año, 1.44×365 = 525.6 Megawatts por año de energía eléctrica.
Ese prototipo que se puede escalar para generar más energía, todo depende de la producción de biogas al tratar residuos con materia orgánica. Ese es un reto de ingeniería urbana y organización territorial. Se halla en la logística,separación y post-procesamiento de los residuos. Empero no es imposible, céntrales de abasto podría proveer FORSU que, al transportarlos a la planta de tratamiento y producción de biogas se transformarían en energía eléctrica y co posta para enriquecer suelo en el campo.
Lo insostenible, además de las termoeléctricas, son posiciones irracionales para impulsar tecnología de hace más de un siglo, sobre todo cuando esfuerzos y desarrollos están a punto de madurar con CTI mexicana, invenciones e innovaciones de propiedad pública que ya están por demostrar su funcionalidad.
La sostenibilidad es bienestar para la población. Una redefinición de políticas públicas para la transición energética en necesaria y conveniente.
Entretanto es relevante no perder de vista que otras obras han sido impulsadas con encuestas a mano alzada o sin metodología apropiada, amañadas, pues, y sin consideración técnica alguna; tren maya, dos bocas, aeropuerto.
Sirvan estas letras para desearle prosperidad y bienestar en compañía de sus seres queridos. Entrare en un receso por periodo vacacional, pero en Enero Ortonormal volverá a contribuir.